Como ya hemos comentado en post anteriores, las extensiones de pestañas son uno de los servicios estrella en la mayoría de los centros de belleza, pero si queremos ofrecer servicios profesionales, seguros y saludables a nuestros clientes es imprescindible que consideremos la obligación de realizar test de alergia previo a este servicio porque, además, la piel del contorno de los ojos es especialmente delgada y propensa a reacciones.
De hecho, una de las principales preocupaciones que tienen los clientes respecto a las extensiones de pestañas es que puedan dañar sus ojos, sus pestañas naturales o que puedan desarrollar una reacción alérgica.
Qué debes saber
Hay dos aspectos muy importantes que todo técnico de pestañas debe conocer:- Que se puede desarrollar una reacción alérgica no solo al pegamento sino también al material de las extensiones, al parche, a la tira de sujeción, etc. aunque lo más habitual es que si hay reacción sea al pegamento y al vapor que desprende durante su curación.
- Que es más probable que se desarrolle una alergia o sensibilidad en clientes que han tenido pestañas durante 6 meses o más que en los nuevos clientes porque las alergias de este tipo son acumulativas, es decir, la sensibilidad aumenta cada vez que el cliente está expuesto al adhesivo de pestañas.
- Debemos utilizar todos los productos que usaríamos en un servicio de extensiones: desde el desmaquillante, primer y parche hasta el sellador.
- Es necesario colocar al menos dos o tres extensiones de pestañas de prueba en las últimas pestañas en la parte externa en ambos ojos.
Cómo se realiza el test de alergia
- Tumbamos a nuestra clienta en la camilla como si fuéramos a hacer el servicio completo, tratando de que esté lo más cómoda que sea posible.
- Examinamos sus ojos para asegurarnos de que no hay ningún signo previo de reacción o sensibilidad.
- Eliminamos el maquillaje y limpiamos bien las pestañas con un producto no oleoso.
- Colocamos el parche para proteger las pestañas inferiores del ojo.
- Aplicamos el Primer sin tocar la piel con la ayuda de un microcepillo.
- Colocamos 2 ó 3 pestañas de prueba en el ángulo externo de cada ojo. Recuerda que el pegamento nunca debe entrar en contacto con el párpado o piel de nuestra clienta. Debemos colocar una longitud similar a la pestaña natural para que no quede llamativo.
- Comprobamos que las extensiones se han adherido correctamente y que no le incomodan.
- Anotamos en la ficha de la clienta todos los datos de la prueba, es decir, todos los materiales que hemos usado (tipo de pegamento, tipo de extensiones, parche, primer, desmaquillante,etc.), número de extensiones colocadas y cualquier información que consideremos relevante.
- Citamos a la clienta 24 horas después para valorar los resultados, indicándole que acuda antes si tiene cualquier síntoma de alergia.